TIN TUN HLAING
nacido en 1969) es un excelente ejemplo de la nueva generación de artistas birmanos que cada vez más se exhiben y coleccionan en todo el mundo. Trabajando en un estilo fotorrealista en óleo sobre lienzo, pinta lo que mejor conoce: la cultura birmana, la tradición y la vida cotidiana en el campo.
La vida en Birmania aún se centra en el budismo y en el ciclo anual de estaciones y festivales. Tin Tun Hlaing representa a los omnipresentes monjes, novicios y monjas con sus túnicas blancas o carmesíes, llevando cuencos de limosnas y refugiándose del sol bajo sombrillas rojas. A menudo se muestra a los monjes novicios estudiando en silencio las escrituras budistas, recortadas en una ventana del templo o descansando a la sombra de una imponente estatua o pagoda. Las figuras son empequeñecidas por la imponente arquitectura del templo, los monjes caminando en fila contra un telón de fondo de las torres de Pagan saliendo de la niebla de la mañana.
La belleza también se encuentra en las escenas cotidianas: mujeres con sarongs de colores brillantes que vuelven de lavar ropa en el río o que llevan jarrones con agua en la cabeza sobre la tierra reseca. Hay una nota afectuosa en las representaciones de Tin Tun Hlaing de madres y niños, que ayudan con las tareas diarias. Otro de los temas favoritos son los pescadores del famoso lago Inlay Lake, que se balancean en los angostos botes de proa alta sobre la superficie del agua con forma de espejo. A menudo Tin Tun Hlaing utiliza una perspectiva de ojo de pájaro que realza el elemento poético de sus composiciones. A pesar de la reciente y turbulenta historia de Myanmar, logra capturar la "Tierra de Oro" que yace bajo la agitación política.
Mercedes Tamara
30-10-2017